
Señores: su comisión me ha honrado la difícil tarea de pronunciar la conferencia en honor de Williams sobre el asesinato considerado como una de las Bellas Artes; una tarea que podría haber sido fácil hace tres o cuatro siglos, cuando se sabía poco de este arte, y aún eran pocos los modelos expuestos, pero en esta época, cuando los profesionales han ejecutado excelentes obras maestras, es evidente que el público reclamará una mejora correspondiente en el estilo de crítica que se les aplique. La teoría y la práctica tienen que avanzar pari passu. La gente comienza a comprobar que hay algo más que contribuye a la comisión de un bello asesinato que un par de zoquetes que matan o mueren, un cuchillo y un callejón oscuro. El diseño, caballeros, la disposición del grupo, la luz y la sombra, la poesía, el sentimiento, se juzgan ahora indispensables para intentos de esa naturaleza.
Thomas de Quincey
No hay comentarios:
Publicar un comentario